Con el fin de llegar con mensajes personalizados y directos a tus necesidades, sentimientos, emociones y acciones, todos quieren tus datos; las empresas, las organizaciones, las universidades y también los políticos. El propósito es tener al publico clasificado y diferenciado en grupos, ya no tanto por las variables clásicas de la demografía, la geografía, las clases sociales y los ingresos y gastos; como por sentimientos y emociones y de manera general por los roles que juegas en la sociedad. Recordemos que todos en la sociedad desempeñados diferentes roles y en cada uno de ellos tenemos actuaciones y decisiones que le interesan a los especialistas en marketing, para orientar sus estrategias de comercialización y entre más detallados sean estos roles, mejor; puesto que permite que una misma persona sea considerada en diferentes grupos( de compradores, usuarios, clientes, militantes, simpatizantes y votantes). Esto es micro segmentación. La tan mencionada operación del escandalo de Cambridge Analytica en 2018, que puso en alerta a los partidos políticos y autoridades gubernamentales sobre el uso de los datos personales, para manipulación política. Aquellas capacidades para segmentar los públicos y poder personalizar las ofertas de productos y servicios tan usados en el marketing, para poder vender y mejor, se trasladan al ámbito de las campañas políticas donde con razón tienen el interés de saber como votaran los electores y para ello que mejor que saber su ubicación, opinión, e intencionalidad y preferencias de voto, para construir perfiles ideológicos y de creencias políticas que se generan en las campañas electorales. Y con bases en esos datos depurados llegar a las personas con mensajes atractivos, convincentes que motiven la acción por el voto a favor.
Hoy que se cuenta con el desarrollo de las TIC, es más fácil de hacer segmentación de los públicos a nivel de detalle; a nivel micro. Hoy con tanta información en redes sociales y bases de datos, permite que el Big-data tenga mejor utilización; profundizando en detalles individuales y personales; claro con peligro de invadir esferas de intimidad. Pero esto ya es otro tema, que podemos dejar para otro día; porque hoy nos interesa es dejar claro que la microsegmentación , no es tan novedosa como se cree, sino que debido al grado de desarrollo tecnológico de hoy, se posibilita con mayor fuerza su uso y efectividad.
Recordemos un poco el pasado; con referencia a Colombia: la segmentación en los años de 1960 y 1970, era de factores muy gruesos de grupos de edades, grupos o clases sociales, razas, clasificación de trabajos, tipo de vivienda, ingresos recibidos, etc. Lo que se denominó factores demográficos, y socioeconómicos. Después en los años ochenta con los test de concepto aplicados a los productos se dieron los estilos de vida, donde las variables psicosociales eran ordenadores de grupos de clientes -recuérdese al hombre Malboro, y luego con los programas de computación de datos y con las técnicas multivariables de estadística se lograban agrupamientos por sentimientos, sensaciones, y emociones, gracias al uso de las baterías de escalas de test ( lo que hoy llaman constructos). Y después modernamente se recurre a las modelos matemáticos y actualmente al Big-data. En aquellos años, para poder tener datos del cliente o consumidor, se recurría a las rifas con tiquetes de compra de las cajas registradores donde quedaban reportados los productos y sus precios y formas de pago y nombre del consumidor y domicilio. Y para las campañas electorales, se pedían a los lideres barriales, listado de sus vecinos, compañeros de trabajo y demás tipos de asociación,(https://es.slideshare.net/efrenbarrerarestrepo/ficha-plan-de-accin-politica) cuyos datos se señalaban en mapas de manera rudimentaria con alfileres, permitiendo detallar las concentraciones de militantes, adeptos y simpatizantes, a los cuales se llegaban con visitas de los candidatos, o sus delgados y se planeaban los mítines y concentraciones; con mensajes directos de promesas electorales y de programas partidistas y muy especializados por sus condiciones socioeconómicas y de ideologías.
Si ayer era posible, hoy con las redes sociales y las técnicas de análisis en combinación con los sistemas georeferenciados es más cómodo lograr conocer esos microsegmentos; y convocarlos en el ciberespacio. Cambiando profundamente el trabajo político; de manera complementaria a la presencialidad; porque para las campañas electorales es importante combinar las diferentes formas de comunicación para lograr el voto.